Al estallar la guerra, y durante su transcurso, los japoneses no habían alcanzado el grado de habilidad científica que les hubiera sido necesario para poder competir con los EE.UU en el mismo terreno, aunque al principio, cuando su avión, Zero, barrió eficazmente toda oposición y les procuró la ventaja óptima en calidad y cantidad. Pero la ulterior aparición de nuevos cazas estadounidenses anuló rápidamente esta superioridad; al final de las hostilidades, el 50% de los cazas japoneses aún eran Zeros que habían combatido en China cinco años antes. Autores: Masatake Okumiya y Jiro Horikoshi, 325 páginas, tapa blanda, formato 210x150 mm., 32 ilustraciones B/N y 1 mapa. Ref. 69924.