En existencias
La única forma que el Imperio Británico tenía de responder en 1840 a la Wehrmacht y de demostrar que estaba dispuesto a continuar la lucha fue mediante la ofensiva que el Mando de Bombardeo británico comenzó tímidamente; pero los comienzos no fueron prometedores. Los medios disponibles eran muy limitados. La progresiva entrada en servicio de los grandes cuatrimotores cambiaría la situación pero nunca se llegaría a resolver adecuadamente el gran problema del bombardeo nocturno, la identificación correcta del blanco y el lanzamiento con precisión en la zona marcada. Editorial: Galland Books. Autor: Juan Vázquez García, 64 páginas, tapa blanda, formato 236x166 mm, 102 ilustraciones B/N y 37 ilustraciones color. Ref. 69915.
|
|